Hace menos de dos años y con un cuellarano como protagonista, Juan Manuel Pérez, la compañía La Quimera de Plástico llevaba a las tablas del Teatro Juan Bravo de la Diputación ‘Las guerras de nuestros antepasados’ de Miguel Delibes, que, avalando su importancia para la escena española y en una de sus múltiples adaptaciones al teatro, volverán mañana viernes, 26 de enero, a subir al escenario del espacio segoviano; esta vez de la mano de Pentación y adaptadas por Eduardo Galán.
A partir de las 20:30 horas y con todas las entradas vendidas, Carmelo Gómez y Miguel Hermoso se convertirán en el recluso Pacífico Pérez y en el doctor Burgueño para mantener una conversación que, para Galán, es “un grito contra la violencia de las guerras" y una forma de defender "la no violencia como camino de vida”.
Durante aproximadamente una hora y media el preso revelará su “carácter complejo, su sumisión a los poderosos, su resignación casi franciscana ante un destino grabado en su memoria desde la cuna con las historias de las guerras que le contaban el Abue, el Bisa y Padre”, en palabras de Galán, para emocionar al público segoviano con una historia en la que el lenguaje rural castellano, que tanto caracterizó al autor vallisoletano en sus novelas y textos, enriquece la escena y la acerca más a su contexto original.
Además del reconocido talento de sus protagonistas, en estas 'guerras' de Pentación destaca el trabajo para ponerlas en pie de dos de los nombres más importantes del teatro español actual, Jesús Cimarro en la producción, y Eduardo Galán en la adaptación, a quien los segovianos conocerán por la autoría y versión de diversos textos que han pasado por el Juan Bravo en los últimos años con su compañía Secuencia3, como 'Blablacoche', 'Los pazos de Ulloa' o 'Tristana'. A ellos se suma en la dirección Claudio Tolcachir para intentar sorprender a los espectadores segovianos con un texto que, desde su publicación en 1975, forma ya parte de la Historia de la literatura española.